El gremio más díscolo de los que actúan en la geografía correntina concretó ayer un paro. Fue el Sindicato Único de Trabajadores de la Educación de Corrientes (Suteco), quien dispuso la medida para exigir mejoras en distintas cuestiones. Los referentes sindicales hablaron de un alto acatamiento a la medida de fuerza. «Tenemos casi el 90 por ciento de acompañamiento de la docencia que está cansada de perder contra la inflación por sexto año consecutivo», aseveró el secretario general Fernando Ramírez. Hizo hincapié en el acompañamiento logrado en el Interior. Según describió, la adhesión en Monte Caseros fue del 98 por ciento; en Mocoretá, 95; Mercedes, 90; en Goya, el 87 por ciento; en Saladas, el 90; Paso de los Libres, con el 88; Virasoro, el 86 por ciento; Santo Tomé alcanzó el 85 por ciento, al igual que Bella Vista, mientras que Itatí y Sauce lo hicieron en un 80 por ciento; en Capital se dio el acatamiento más atenuado, con el 67 por ciento. «Es un paro contundente e histórico contra la política salarial que atrasa, contra el recorte de derechos, contra el maltrato de la obra social y de reconocimientos médicos, por las escuelas que tienen sobrepoblación, están sin agua y se caen a pedazos», manifestó Ramírez. RECLAMOS Durante la movilización de educadores en la Capital provincial, el Suteco entregó nuevos petitorios en Casa de Gobierno y el Ministerio de Educación, demandando plus por cargo e incluido al básico, actualización retroactiva a enero y cláusula de revisión a julio, ítems de movilidad y zona desfavorable, pago de salarios atrasados a profesores, escuelas en óptimas condiciones sanitarias, exámenes psicofísicos en hospitales públicos, que se brinden prestaciones médicas, entre otros puntos.
