El proyecto encabezado por Nahuel Hollmann —el docente correntino reconocido a nivel nacional— busca fomentar el conocimiento en niños y adolescentes. Las autoridades se reunieron con el Banco de Corrientes para gestionar herramientas de trabajo.
El Centro de Innovación y Robótica en Riachuelo superó su cupo de inscripción: pasaron de tener lugar para 45 estudiantes a alcanzar 123 inscriptos. “La gran mayoría son niñas y eso es lo que nos atrapa, que estamos rompiendo los estereotiopos”, contó a El Litoral, Nahuel Hollmann, encargado del proyecto. Además, gestionan insumos con el Banco de Corrientes para conseguir la financiación que los ayude a continuar con el proyecto. El nuevo proyecto de Riachuelo busca generar un espacio educativo multidisciplinario en el que se desarrollen ideas y proyectos de índole internacional con niños y adolescentes. Además, se promueve la creatividad y la innovación tecnológica en niños/as y jóvenes de Riachuelo y cercanías, y se les aportan las herramientas adecuadas para incentivar su aprendizaje. Ayer, el equipo docente se reunió con tutores para diagramar el año educativo. Confirmaron que el dictado de clases irá hasta diciembre y buscan insumos con entidades públicas. “Fue una reunión muy positiva donde se aclararon las formas de trabajo, de la mirada que le queremos dar. Se presentaron los profes y explicamos los horarios”, contó Hollmann. “La verdad es que estaba pensado para 40 minutos y estuvimos casi una hora y media charlando”, sumó. Para el docente hubo un dato superador: “Algo en lo que yo quería concientizar era que aprovechen esta oportunidad, pero no hizo falta. Los padres y las madres saben la oportunidad que están teniendo sus hijos e hijas y no quieren que se escape”. El lunes será la reunión con los tutores del grupo de adolescentes. Sobre los inscriptos, Hollmann detalló que alcanzaron a anotar a 123 personas en 24 horas. “Habíamos habilitado un cupo de 40 estudiantes, pero superó por completo nuestras expectativas. Tuvimos que reunirnos con el intendente y evaluar extender la cantidad de inscriptos”, contó el docente. El grupo de estudiantes que accederá al taller es de la zona. “Son de Riachuelo, San Cayetano, Cañada Quiróz y también de la ruta”, enumeró. Al respecto, Hollmann contó que la cantidad de mujeres inscriptas varía según la edad. Elemento importante porque uno de los objetivos del proyecto es acortar la brecha de género. “Me pasó algo increíble que comprobé. Hace un tiempo había estudiado por qué las niñas se alejan de las tecnologías cuando crecen. En el libro ‘Chicas en tecnología’ (un manual de una ONG especializada) dice que desde los 12 en adelante empiezan a perder el interés, por cuestiones de desigualdad, estereotipos y muchas otras cuestiones. Nunca es porque quieren. Lo con este curso lo comprobé”, admitió. Según el docente, en el grupo de niñas de 9 a 12 años son la misma cantidad de niñas y varones. Sin embargo, en el grupo de adolescentes son más varones que mujeres. “Eso le hicimos ver a los papás de motivar a esas nenas que sigan, que no lleguen a los 13 o 14 años y pierdan el interés por las tecnologías. Hay que aprovechar eso porque tiene sustento científico”, sumó. Gestión de insumos La semana pasada, autoridades municipales se reunieron con personal del Banco de Corrientes para gestionar insumos. “Solicitamos el acompañamiento de este organismo a este importante proyecto, que promoverá el desarrollo de competencias y habilidades en lo tecnológico”, contaron desde la Comuna. “Favorecerá la empleabilidad y los emprendimientos en el ámbito tecnológico de nuestra localidad y la provincia”, sumaron. El objetivo es que puedan aportar colaboración para tecnología y robótica. (BDC)
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